La complejidad de este tema, y más con toda la repercusión social que está teniendo y toda la publicidad que se le está dando en los medios de comunicación, pero intentaremos abordar el tema de la mejor forma posible dentro de nuestras posibilidades.
Primeramente, creeo que sería importante el tener claro el significado de la palabra dopaje o doping. Es el empleo de sustancias estimulantes o excitantes administradas por cualquier vía, con el fin de conseguir un mayor rendimiento deportivo de un atleta en la competición; y que pudiera suponer un perjuicio a la ética deportiva y a la integridad física o psíquica del atleta.
De siempre se han conocido casos de dopaje en el deporte pero desde que estalló el escándalo en el Tour de Francia del 98, la lucha contra el dopaje se acentuó aún más. Continuamente vemos en los medios de comunicación nuevos casos.
Y... ¿quién tiene la culpa?. Los deportistas tienen un gran afán de superación y competitividad; el público quiere espectáculo; los altos cargos, entrenadoras y entrenadores piden resultados y medallas; los médicos controlan lo que toma el deportista pero éste, muchas veces, no tiene conocimiento de lo que toma...
¿Qué es el doping? El doping es un tema, o mejor un problema, que ha traspasado las fronteras del ámbito estrictamente deportivo y ha llegado a otros núcleos sociales, al hombre de la calle. ¿Razones? Dos son las más convincentes. En primer lugar, el deporte va siendo una actividad más y más popular, tanto en el ámbito de participación como de seguimiento; es lógico que cualquier tema relacionado con él suscite interés y pase de inmediato a ser del dominio público. Y por otra parte, el problema del doping no es sino un reflejo de nuestra forma de vida, basa da a diario en el medicamento que se utiliza para eliminar el dolor, para evitar la depresión, para aumentar la actividad; e incluso, con una aseveración más drástica, se puede considerar que el doping es un síntoma del actual problema de la droga en la sociedad.
Tratar de definir el doping es algo muy complejo. La primera definición con validez y efectividad durante casi veinte años es la aprobada en 1963 por el Comité de Educación Extraescolar del consejo de Europa:
El doping es la administración a una persona sana, o la utilización por ella misma, de sustancias extrañas al organismo o de sustancias fisiológicas, en cantidades o por vías anormales, con el único fin de conseguir un aumento artificial del rendimiento de esta persona al participar en una competición.
¿Existe el doping? Es evidente que el doping existe; así lo demuestran los resultados de los controles analíticos, ya que mediante su realización se ha detectado un número creciente de infracciones en una cada vez más extensa gama de deportes.
Esta aseveración se puede constatar con los resultados estadísticos obtenidos de los análisis realizados en el Laboratorio de control del Consejo Superior de Deportes entre 1969 y 1988. Durante estos veinte años se han realizado más de 20.000 muestras, con un progresivo aumento anual muy significativo en los dos o tres últimos años. Comparando estos veinte años, el número de deportes controlados ha sido más alto en estos años que anteriormente. Y sobre todo destaca significativamente a este respecto el año 1988. Pues bien, y sin entrar en detalles, la baja en el porcentaje de resultados positivos que se consiguió con la instauración de controles, se traduce, al realizar más controles y en nuevos deportes, en un aumento de dicho porcentaje.
Y esto en referencia a los deportes que se controlan, por que lo que es verdad es que nadie puede asegurar que no hay doping en un deporte mientras que en él no se realicen controles.
Y también se puede asegurar que cuando en un deporte se comienzan a efectuar controles, la practica de del doping en él tiende a disminuir.
Y todo ello sin olvidar, los tristes casos de muertes ocasionadas por el doping.
¿Desde cuando existe el doping? Ha sido en la actualidad cuando el doping ha adquirido protagonismo, pero su existencia data de siglos.
Su práctica se ha asociado, en diferentes épocas y civilizaciones, a la intención de llegar más lejos y más alto, ser más fuerte.
Por ejemplo, existen referencias que testifican su práctica entre los participantes de los antiguos Juegos Olímpicos en la Grecia Clásica para mejorar su rendimiento y aumentar su fuerza.